Los videojuegos apuntan hacia el entretenimiento. Su objetivo es bastante simple: desarrollar una temática o concepto y hacerla jugable.
Hay juegos que buscan recrear alguna situación, es entonces cuando nos enfrentamos a algo más que un simple reto, múltiples opciones, y mayor dificultad.
Y hay otros que poseen tal argumento, tal inmersión en la mente del jugador, o tal profundidad en su historia, que terminan convirtiéndose en obras maestras.
Este es el caso de
Thief, The Dark Project y posteriormente de sus dos continuaciones, los juegazos
Thief II, The Metal Age; y
Thief III, Deadly Shadows.
Thief es un juego en primera persona que te sitúa en la Edad Media de la magia y brujería, de los castillos llenos de riquezas, de los paganos que habitan la ciudad.
Tu eres
Garrett, un pequeño vagabundo con extraordinarios dotes de ladrón. Te pasas el día donde la luz es escasa; robas y le vacías los bolsillos a la gente. Un día intentas robar una pequeña bolsa a la persona equivocada... ¿o correcta? Cutty, un misterioso ser de la secta
Keepers (Guardianes), quien mientras sujeta firmemente tu mano dice
"Eso no es para ti". Impresionado por tu habilidad te da la opción de seguirlo para instruirte en el combate y en arte del robo sigiloso.
Años mas tarde ya eres un
Keepers con increíbles capacidades. Robas sin ser descubierto mansiones altamente vigilada por guardias armados, sistemas de turnos y protecciones. Desciendes a mausoleos milenarios bajo la tierra para descubrir secretos sobre la evolución mientras te apoderas de todo el oro de reyes momificados; o te introduces en húmedas prisiones de tortura, malditas por muertos vivientes, mientras te traga una trama cada vez mas compleja que llegará a sobredosis cuando conoscas a
Constantine, un coleccionista de artefactos que te encarga robar una preciada espada en un castillo donde todo es anómalo, sin leyes de lógica y cargado de ilusionismo.
Desde este punto tu vida no volverá a ser la misma pues descubrirás que las visiones de la Orden de los
Hammerites, secta que adora la imagen del Martillo de Piedra, ingenieros y sabios de la ciencia y la brujería; eran ciertas, el dios que pregonaban se hace presente frente a nuestros infartados ojos ante el caos de su furia en una sinópsis asombrosa, de esas que hacen petrificarte en la silla.
Es así como te enteras de una verdad en donde las fuerzas del universo, tal como lo decían las profesías de los
Keepers y los
Hammerites, serían puestas en una balanza y gobernadas por el Ojo, en la mano del Embaucador.
Pero bueno, no voy a contarles toda la historia, verdad? Mejor les ánimo a que consigan el juego (yo lo tengo) y sean participes de esta historia soberbia que puedes jugar.
En el aspecto técnico este juego es increíble sobre todo para el año en que se publicó (1997). El sonido es asombroso, puedes escuchar a tus enemigos mientras ellos no sientan nada, informarte tras una puerta de los planes de vigilancia; utilizar un arsenal de flechas como las normales, de fuego, agua, moho para pisar sin ruido, soga para trepar, gas, e incluso flechas de ruido para despistar. Además cuentas con bombas incandescentes mecánicas, de gas o explosivas, un espada pesada, una cachiporra para aturdir, mas todo un arsenal de brújula, mapa y ganzúas para guiarte y robar.
La inteligencia artificial del juego es asombrosa, los guardias o seres mutantes están alerta al ruido, se saldrán de su recorrido si algo anda mal, si llegan a descubrirte están altamente capacitados en combate como para matarte sin problema, hacen emboscadas y se alertan con precisión entre ellos.
El juego mezcla los escenarios medievales de castillos, calles oscuras de la Inglaterra barroca, salones de baile para la alta sociedad, catacumbas con seres prehistóricos, cementerios embrujados, ruinas bajo la tierra, portales dimensionales, catedrales encantadas, entre muchos otros escenarios repartidos en 12 misiones interminables.
La jugabilidad es buena, puedes sumergirte en túneles de agua, pozos o pasadizos estancados, trepar paredes, medir los disparos con el arco calculando distancia y fuerza de tiro, caminar silenciosamente, combatir con la espada (cuando ya no haya mas opción, pues el estilo de juego sugiere el sigilo, y la técnica de pasar por invisible, cosa que se complica cada vez más), activar máquinas, sistemas de iluminación, comer panes o verduras en alguna cocina cuando tengas la oportunidad, comprar armas o items con el dinero que juntas en misiones, etc.
Como dije anteriormente, el punto mas alto de este juego es sin lugar a dudas el guión y al forma en como este se enrosca y te deja helado cuando descubres un documento importante o cuando las diversas sectas que existen te revelan sus secretos. Los 12 videos introductorio a las misiones, y los 4 Cinemáticos son para enloquecer. Hay un momento en donde sientes el miedo estando tras una puerta, o escuchando los lamentos de prisioneros torturados, voces endemoniadas, o risas histéricas.
Y un final que nadie se podría imaginar...
A diferencia de otros Shoot em Up en donde hay que destrozar engendros con armas de plasma y Shootguns, aquí encontraras que el sigilo y las sombras son tus mejores aliadas, evitar el combate de frente es clave, como un experto ladrón tu supervivencia depende de la capacidad que tengas para pasar inadvertido, valiéndote de muchos recursos y por supuesto, de tu mente.
Para finalizar, es recomendable jugarlo con unos buenos parlantes, de preferencia con un Woofer, la luz apagada y la mente dispuesta a no sentir miedo aunque te estés restregando por dentro de pavor.
Este juego fue el primero para una saga sorprendente que mas adelante iré comentando en cada una de sus entregas.
Absolutamente Recomendado.
"The Eraser", Thom Yorke.
